martes, 11 de diciembre de 2012

APOLOGIA DEL GENOCIDIO CONTRA LOS CRISTIANOS

APOLOGIA DEL GENOCIDIO CONTRA LOS CRISTIANOS

La legislación española castiga toda apología, favorecer, justificar o incluso minimizar, (e incluso negar) cualquier genocidio, definiendo como tal toda acción que discrimine o cause violencia por culpa de pertenecer a una raza o religión. Así mismo se castiga el que fomente odio contra una raza o religión.
Ni decir tiene que cualquier persona sensata apoyaría esta ley si se usara correctamente, o sea si fuera para evitar que una persona o raza o religión fuera perseguida o violentada por su mera existencia, no por sus acciones concretas.
Lo más curioso, si no conociéramos el origen  de esta ley y su intención real, es que nunca, jamás, se ha usado para evitar o castigar cualquier tipo de actuación que fomentan odio o violencia contra los cristianos, y en cambio siempre se utiliza SOLO y exclusivamente cuando la opinión es sobre el tema judío.
Hay en España unas cuantas revistas llamadas ‘de humor’ donde se publican semanalmente burlas, ataques, incluso pornográficos, contra la Iglesia, Cristo o los cristianos, siendo estas revistas de venta pública e incluso subvencionada por el Gobierno. Si una revista se atreviera a publicar un chiste contra los judíos, sería inmediatamente procesada.

Pero el colmo de la desfachatez se ha producido cuando se ha publicado en el principal diario de Barcelona, La Vanguardia, el discurso de la ex anarquista de la FAI (Federación Iberica Anarquista) Federica Monseny, ex Ministra de la República, discurso del 25 Octubre de 1936 Federica Monseny, donde indica: “¿Qué extraño tiene que en España hayamos quemado Iglesias y conventos?”.
La Monseny, ya afortunadamente muerta, tiene asignadas en España nombres de calles, premios literarios subvencionados, alabanzas permanentes y libros de loa cada año. Si su frase hubiera sido: “¿Qué extraño tiene que en España hayamos quemado las Sinagogas?” estaría prohibido incluso nombrarla y más aun alabarla o asignarle premios y calles.
Decía la Monseny, con esa desfachatez que caracteriza a los comunistas y anarquistas: ‘Nosotros hemos hecho fusilamientos pero ningún tormento, ningún refinamiento de crueldad y lo hemos hecho porque o matamos nosotros o nos matan ellos”. “En España no se ha destruido y si se ha matado ha sido por la convicción de que era preciso y con pleno conocimiento de causa”
Esto dicho por la dirigente de la FAI es jocoso: la FAI asesino, legalmente dicen, a miles de monjas y monjes de clausura, sacerdotes y fieles, que jamás habían hecho nada más que rezar o ir a la Iglesia. Suponemos que ‘era preciso’ matar a las monjas de clausura de 80 años, como muy peligrosas….?
Y sobre los tormentos y refinamientos, no debe recordar la Monseny que ellos inventaron las ‘checas’, centros de tortura refinada y científica, dirigidos por la GPU soviética, centros que se han encontrado y estudiado sin que los niegues ni ellos mismos.

El ex Presidente de la República, Azaña, masón del máximo nivel, que declaraba “elevad a las monjas a la categoría de madres”, promoviendo la violación de las monjas y la quema de conventos, tiene también calles, premios, monumentos… si en vez de monjas cristianas fueran mujeres de una raza cualquiera, sería condenado y prohibido todo lo referente a Azaña.

Así hoy en día se permite cualquier apología de discriminación o fomento del odio, insulto o escarnio de la religión cristiana en base a ‘libertad de expresión’, pero en cambio se condena toda crítica, incluso suave, si se trata de judíos, la razón es evidente: el mundo actual está dirigido por grupos de poder sionistas, no por los cristianos, y así va.

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